La vida es un alfabeto en mutación
Lo perenne se vuelve efímero
mientras un instante logra eternizarse
momificando emociones
Los rostros perduran
miradas encontradas
extraviadas en los senderos de lo cotidiano
Manos
pieles que se rozan
(algún día)
decapitadas por el tiempo
Lo perenne se vuelve efímero
mientras un instante logra eternizarse
momificando emociones
Los rostros perduran
miradas encontradas
extraviadas en los senderos de lo cotidiano
Manos
pieles que se rozan
(algún día)
decapitadas por el tiempo
http://karina-crespo.neurona.com
1 comentario:
Vamos a recordarlo por siempre.
Se lo diremos a nuestros nietos.
Quizá ellos logren entender
lo que es vivir en el infierno.
Lo recordaremos de por vida.
Los flacos huesos, el silencio.
Tantas manos urgando basura.
Tantos ojos llorosos, gimiendo.
Las moscas girando en su torno.
Las cloacas, las villas... el miedo.
El rostro del padre impotente.
Las vidas que acaban sin sueños.
Vamos a recordar los culpables.
Vamos a transmitir el desprecio
a las bestias perversas que cargan
hondo en su vida todos los muertos.
Hambre será la estoica palabra,
llantos de niño el fénix de fuego
que grabará un cielo celeste
con promesas de calvario eterno.
Vamos a recordarlo a todos.
Vamos a difundir el deseo
de extirpar de nuestras vidas
su opaco aspecto siniestro.
Sus tantas e infames mentiras,
su burla, su vileza, su juego,
su mafia, su violencia, su desdén,
sus transas, su ignorancia, sus fueros.
Sepan que vamos a recordarlo.
Empiecen ya a ponerse inquietos,
pues vamos a enrostrarles todo:
Uno por uno, muerto por muerto.
Pd. Fantastica la página.
Publicar un comentario